martes, 14 de marzo de 2017

Amor, si lees esto...

Cuánto duele un adiós.. Una despedida fría, sabiendo que no vas a saber de esa persona en mucho tiempo y quizás, por el resto de tu vida. No volverás a ver su bonita sonrisa, ni el cielo que llevaba en sus ojos. Tampoco volverás a sentir su intensa mirada, ni a escuchar su voz. Cuánto duele su marcha.. Sabiendo que junto a ella, se ha ido un cacho de tu corazón que ahora está destrozado.. No recibirás ya sus mensajes de "Buenos días" que hacía que empezaras las mañanas de otra forma. Cuánto duele pasar por aquellos sitios dónde vivisteis momentos especiales. Jamás te imaginaste pasar por ese momento y mucho menos que fuera tan duro y te dejara totalmente inerte. Habíamos hecho tantos planes juntos... Y ahora, eso ya es pasado. Todo pasa a ser triste, noches en soledad, la oscuridad se apoderan de mi y no hay nada que me haga levantar cabeza. He perdido lo que te mantenía vivo, la llama que me daba pasión en las noches y la ternura de las mañanas siguientes de esas noches, te llevaba el desayuno a la cama.
Si algún día lees esto, quería decirte que mi vida no es igual sin ti. Que desde que te fuiste, no he sido el mismo y que te extraño mucho. Rezo todos los días rogando volver a saber de ti.. Se me hacen tan duro los días sin ti. He guardado todas nuestras fotos y cada noche, antes de irme a dormir, las veo anhelando cada momento junto a ti y pretendiendo, que aunque sea sólo en mis sueños, vuelvas. Te amo y te amaré por siempre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario